El síndrome de Asperger es un trastorno del desarrollo que forma parte del espectro autista, en esta ocasión no me enfocaré a explicar o dar información al respecto, lo esencial es comprender que hablamos de personas con dificultades para la interacción social, problemas para la comunicación, comportamientos repetitivos o perseverantes y limitada gama de intereses.
Cada 18 de febrero se conmemora el Día Internacional del síndrome de Asperger y es a raíz de esto que quiero compartir mi experiencia. Durante algún tiempo mi trabajo consistió en apoyar a adolescentes y fue en este momento que trabajé de cerca con una persona con Asperger.
No importa cuánto sepas acerca de la teoría o de los criterios diagnósticos. Nunca son suficientes porque no hay ningún manual que te ayude a conocer a una persona con toda su complejidad. De acuerdo a lo que yo sabía, tenía claro que lo más importante y desde donde podría ser un apoyo para establecer un vínculo y una relación cercana, así que fue en este aspecto que me concentre principalmente.
Establecer un vínculo me permitió conocer a una persona bondadosa, cariñosa, amable que enfrentaba muchas dificultades para poder relacionarse, a pesar de tener un gran deseo por hacerlo. Crear la relación no fue fácil, a pesar de que los dos teníamos la disposición y el interés, se fue formando lentamente, me implico abrir el panorama para poder entender muchas de las conductas que presentaba y que tenían como fin acercarse, aunque vistas desde fuera no podían ser consideradas como algo socialmente deseable.
Entiendo que mi lugar era privilegiado, tenía bastante conocimiento (teórico) acerca del Asperger, estaba desde una posición de acompañamiento y apoyo que me permitía acercarme de diferentes maneras, esto no es lo habitual cuando tenemos frente a nosotros a alguien con dicho síndrome. El espectro es muy amplio y por lo tanto también como se presenta. Como mencionaba, no existe un manual o una forma única de relacionarse o establecer un vínculo con alguien con Asperger, es necesario abrirse a nuevas formas de interacción y entendimiento.
Cuando pienso en algunas personas que me he encontrado en diferentes momentos de la vida, hoy podría considerar que tienen algún grado dentro del Asperger a algunas en su momento no las comprendí y me parecieron extrañas, sé que hoy mi acercamiento sería distinto.
Hay muchas cosas que podría contar acerca de lo que viví en ese momento, sin embargo lo importante es la experiencia y el entendimiento que me dejó, y es eso lo que me gustaría transmitir este día. Yo le recuerdo como una persona especial, que me dejó muchos aprendizajes y me permitió conocer a alguien más allá de su síndrome. Espero que de alguna forma sea recíproco y cuando se acuerde mi también lo haga con cariño.
Valentina Pérez Rodríguez
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